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El calendario, los meses y la etimología.

… vi la circulación de mi propia sangre, vi el engranaje del amor y la modificación de la muerte, vi el Aleph, desde todos los puntos, vi en el Aleph la tierra, vi mi cara y mis vísceras, vi tu cara, y sentí vértigo y lloré, porque mis ojos habían visto ese objeto secreto y conjetural, cuyo nombre usurpan los hombres, pero que ningún hombre ha mirado: el inconcebible universo.
J.L. Borges. El Aleph

Quizás tiempo y espacio sean solo una construcción humana, quizás no haya tiempo, quizás no haya espacio. Quizás la realidad es un cuento fantástico. Lo cierto es que los bípedos implumes se han ocupado de medir el tiempo tomando como referencia los ciclos naturales del sol y la luna, que giraban alrededor de un planeta Tierra imóvil antes de que Galileo proclamara ¡E pur si muove! ante el Tribunal de la Santa Inquisición.

Contamos los siglos, las décadas, los lustros, los años. Contamos los meses, las semanas, los días. Contamos las horas, los minutos, los segundos. Vivimos ajustados a un calendario, palabra que está relacionada, precisamente con contar a través del verbo latino computare. Los romanos llamaban calenda al primer día del mes, fecha en que los cobradores pasaban por las casas con sus libros de contabilidad.

Hoy tenemos doce meses. El primero es enero, palabra que deriva del latín ianurus, nombre de Jano, el dios bifronte que mira hacia el pasado y hacia el futuro. Noten la similitud entre diferentes lenguas, aún con aquellas no latinas: January en inglés, Janvier en francés, Gennai en italiano, Januar en alemán y Janeiro en portugués. El nombre completo  de la antigua capital de Brasil es São Sebastião do Rio de Janeiro, en honor del santo que falleció el 20 de enero. Febrero estaba consagrado al dios Febo (el Sol), marzo al bélico Marte, abril aparentemente proviene de una palabra griega para nombrar a la sensual Afrodita, mayo de Maio -la madre de Mercurio- y junio de Juno la celosa (con motivo) esposa de Júpiter. ¿Y los demás meses? Tomaron el nombre del orden que ocupaban en el calendario: septiembre, el séptimo; octubre, el octavo, noviembre, el noveno y diciembre, el décimo.  ¿Dónde están julio y agosto? ¿No coincide con el orden actual? No, porque estos meses fueron desplazados dos lugares cuando se incorporaron los meses quintilis y sextilis, posteriormente llamados julio y agosto, dedicados respectivamente a Julio César y a Octavio, quien tomó el nombre de Augusto al asumir el trono del Imperio Romano. En el año 46 a.C. Julio César, asesinado en los idus de marzo, cambió el inicio del año de marzo (mes en el que comenzaba hasta entonces) a enero; por eso se habla de calendario juliano. El Papa Gregorio XIII introdujo en 1582 nuevas modificaciones para ajustar el calendario a las celebraciones de la Iglesia Católica. Este calendario gregoriano es el que ha llegado, modificaciones de por medio, hasta nuestros días.

Les recomiendo leer El Calendario Romano y la División del Tiempo en el portal Impervs.org. Para saber sobre otros calendarios (chino, maya, azteca, etc.) vean, por ejemplo, esta página.

Si les interesa el calendario maya y quieren saber su firma galáctica, vean este sitio.

Para terminar les dejo este texto y mis deseos de felicidad:

Para saber el valor de un semestre, pregúntale a un estudiante que reprobó el examen final.

Para saber el valor de un mes, pregúntale a una madre que ha dado a luz prematuramente.

Para saber el valor de una semana, pregúntale a un editor de la revista semanal.

Para saber el valor de una hora, pregúntale a los amantes que esperan para verse.

Para saber el valor de un minuto, pregúntale a la persona que perdió el tren, el autobús o el avión.

Para saber el valor de un segundo, pregúntale a quien haya sobrevivido a un accidente.

Para saber el valor de una milésima de segundo, pregúntale al atleta que ganó una medalla de plata en las Olimpiadas.

El tiempo no espera a nadie.

Atesora cada momento que tienes.

Mis deseos de felicidad y de que la humanidad honre la vida. Y recordemos:

Carpe Diem, Tempus fugit.

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virgulilla.wordpress.com-El_calendario_los_meses_y_la-etimologa

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